El presidente brasileño Jair Bolsonaro pronuncia un discurso y muestra el bolígrafo que utilizó para la firma del decreto presidencial que flexibiliza la posesión de armas de fuego, en el Palacio Planalto de Brasilia, el 15 de enero de 2019. (EVARISTO SA/AFP/Getty Images)
Jair Bolsonaro apenas lleva cuatro meses y unos pocos días como presidente de Brasil, pero ya ha hecho cambios fundamentales que están dando resultados. Uno de los pilares de la campaña presidencial fue la seguridad. Brasil es un país extremadamente violento y Bolsonaro tenía claro cómo afrontar ese problema. Su apuesta ha sido siempre flexibilizar el porte de armas y crear una coraza jurídica para proteger a quienes eventualmente tengan que hacer uso del arma.
El mandatario ha firmado un decreto que flexibiliza el porte de armas, y ahora quiere ir más allá y avanzar en la protección jurídica de aquellos que usen armas para defenderse. Los decretos firmados por Bolsonaro y los anuncios de lo que pretende seguir haciendo en esta materia, ya están dando resultados. La cifra importante es la siguiente: en relación con el primer trimestre del 2018, los homicidios cayeron 24 % en el primer trimestre del 2019.
En el podcast de hoy vamos a hablar de esta cifra, de lo que ha hecho Bolsonaro respecto a seguridad y de sus muy buenos resultados en tan poco tiempo. Nuestro invitado es el brasileño Levi Borba, empresario y editor de la página USP Livre.
Borba resalta que 24 % es una cifra muy importante, pero, además, si se mira con detalle, los estudios muestran que la reducción de los homicidios se da en todos los estados. El resultado de las políticas de Bolsonaro es tan bueno que aunque los medios de comunicación intenten no hablar de ese 24 %, las redes sociales —que fueron la principal herramienta de campaña de Bolsonaro— no permiten que la cifra pase desapercibida.
Y aunque la justicia brasileña quiera frenar los cambios que está haciendo el mandatario en este campo, Bolsonaro tiene grandes esperanzas de ganar la batalla. Nuestro entrevistado nos recuerda que recientemente, cuando la justicia intentó frenar sus reformas económicas, la presión social fue tal que la Corte desistió en su intento de echar abajo el plan del conservador.
Hoy hablamos de flexibilización del porte de armas, de seguridad en materia judicial para quienes deban usar un arma y de cómo estas medidas han bajado los homicidios en Brasil.
Artículo originalmente publicado por Vanesa Vallejo en PanamPost.
La Gran Época